Siempre he sido del Barça. Desde pequeñito. No sé, uno nace con ello. Si, ya sé que soy de Barcelona y catalán y, claro, así tienes muchas papeletas para ser culé. De todas maneras hay mucha gente de aquí que son españolistas o madridistas o a los que simplemente no les gusta el fútbol o al menos no lo viven tan intensamente. Yo, cuando todavía era un renacuajo, a veces ni cenaba cuando perdía el Barça. Y aunque los jóvenes de ahora solo conocen la última etapa triunfal del equipo azulgrana, los que pasamos de los cuarenta las hemos visto de todos los colores. Porque los que tenemos memoria recordamos temporadas y temporadas en que no se ganaba nada. Todo lo ganaba el Real Madrid. Las vueltas que da la vida, ahora es al revés.

En estos años tan duros, con la crisis golpeando a todo el mundo, pobres, ricos, jóvenes y mayores, el Barça ha sido una de las pocas cosas que no nos ha fallado. Nos ha dado alegrías una tras otra, y nos ha permitido, a los que no nos perdemos un partido en el Camp Nou, ver auténticas obras de arte que perdurarán en nuestra memoria. Es un verdadero privilegio ser socio de este equipo, que además de ser probablemente el mejor de la historia, está compuesto por un conjunto de futbolistas y técnicos con unos valores humanos que son un ejemplo para todos.

Los barcelonistas hemos tenido la suerte de vivir aquí y ahora, no en blanco y negro y hace cincuenta años, como, un grupo de deportistas de élite, muchos de ellos de la cantera del equipo, y dirigidos magistralmente por Josep Guardiola, también de la casa, han conseguido hacer un juego preciosista, respetar en todo momento las reglas del juego y al equipo contrario y encima ganar la mayoría de los títulos que han disputado. Ese equipo liderado por Messi, el jugador más determinante de la historia y que cuando acabe su carrera será considerado unánimemente el mejor de todos los tiempos, nos ha llevado a dos finales de Champions League . Yo estuve en Roma y ganamos. Y estuve en Wembley y volvimos a ganar. La sensación fue indescriptible. Es un honor pertenecer a este club. Va por ti, Barça.